El trapillo es un tipo de material que se fabrica con las sobras de tejido de la industria textil o reciclando prendas. También lo puedes fabricar en casa reciclando viejas prendas. (Si quieres que te enseñe a hacerlo, escríbelo en el apartado de comentarios y prepararé un tutorial)
El trapillo se suele trabajar a crochet, pero debido a su tamaño, con agujas de ganchillo más grandes de las que usamos habitualmente: 8mm, 10mm, 12mm, 15mm, 20mm… También lo puedes trabajar con la técnica de ganchillo tunecino o dos agujas.
Existen diferentes tipos de trapillo:
– Según el material: El clásico es el de algodón, algo así como si cogieras una camiseta corriente y la cortaras a tiras. Pero también lo hay de lycra, con lúrex, el trapillo pluma que suele ser de algodón mezclado con acrílico…
– Según el grosor: Al igual que los tamaños de aguja, los hay finos, del tipo para trabajar con aguja de 8 mm, hasta XXL, para trabajar con 20 mm o con las manos.
– Según el color: Tal y como encuentras en la industria textil, existen trapillos de un solo color, jaspeados, estampados…
Se pueden tejer muchísimas cosas en trapillo. A mi me gustan especialmente las cestas, los bolsos y clutch, y las alfombras. Para empezar, las cestas son tan útiles para organizarlo todo… desde las especias en la cocina, cables, la ropa interior, juguetes, ovillos y agujas de lana, a modo de tiesto, tienen mil utilidades.
Para tejer cestas grandes, te recomiendo el trapillo de algodón o lycra para tejer con aguja de 15 mm para arriba. Durante el embarazo tejí para mi peque un moisés con trapillo de algodón en dos colores, le añadí una base de cartonpluma y un colchón de gomaespuma y quedó genial. Ahora que ya ha crecido, saqué la base y la usamos como cesta para guardar juguetes. Para cestitas, tiestos o lapiceros, te irá mejor con un trapillo algo más fino, aunque el grueso también puede quedar bien, dependiendo de el efecto que busques.
Pincha aquí para aprender a tejer la tuya.
Otro de mis favoritos son los bolsos y bolsitos de mano o clutch, son muy sencillos de tejer y lucen muchísimo. Para ello, te recomiendo que siempre utilices trapillo pluma, ya que es la variedad más ligera y evitará que cargues con demasiado peso. En este tutorial tejo unas carteritas con hilos finos pero puedes hacerlas iguales pero más grandes, te quedarán preciosas a modo de clutch, e incluso puedes añadirles un asa para convertirlas en bolso.
Y por último, las alfombras. Son proyectos más largos, con una mayor cantidad de material y permiten infinidad de combinaciones. Para ello, un trapillo clásico de algodón, bien gordito, te irá genial, conseguirás una pieza bien gordita y con presencia. En este caso esta alfombra que tejí para las primeras sesiones de suelo del peque, tiene una puntada muy sencilla y lo que destaca es el color. ¡Nos encanta! Pero si quieres un resultado más trabajado, puedes buscar, por ejemplo, un patrón de mandala o granny y adaptarlo para convertirlo en alfombra, ¡lucirá preciosa en tu rincón favorito!
¡Pongamos a nuestra “Lalocadelacasa”, la imaginación, a jugar!
Que tengas un maravilloso día y mucho ánimo, paciencia e imaginación para estos días cuarentena,
Oihana
Lalocadelacasa